Día de los Inocentes de 2010, pero la cosa va en serio. Isla de Tenerife, Teide (3718 m): estratovolcán activo con última erupción en 1798, punto culminante de las 18.990 Ha. del Parque Nacional del mismo nombre, máxima cumbre del estado español y de cualquier isla emergente en el Atlántico, tercera montaña más alta del mundo medida desde su plataforma oceánica. En otros países, su ascensión al menos una vez en la vida sería cuestión de orgullo nacional; en este nuestro, una pequeña satisfacción reservada a algunos excursionistas que visitan o viven en las islas.
Muy pocos, a juzgar por el tamaño del aparcamiento en la base de la Montaña Blanca (12-15 coches), punto de partida de la única ruta oficial de subida. La mayoría usa el teleférico, que por 25 € ida y vuelta te deja a 3.550 m. de altitud y a media hora de la cumbre, pero eso no vale.
Hasta este punto puede llegarse desde el norte (a partir de La Laguna o del valle de La Orotava), o como nosotros por el sur, desde Granadilla o Arona. En este caso pasaremos por el municipio más alto del archipiélago canario, Vilaflor (1.400 m), antes de adentrarnos en el alto Llano de Ucanca y en las Cañadas del Teide.
Las Cañadas es el nombre por el que se conoce la enorme caldera volcánica formada entre la montaña del Teide propiamente dicha (al NW) y una escarpada pared semicircular de casi 20 Km. de largo y orientación NE-SW, que pierde altura en los extremos y cuyo pico más elevado es la montaña de Guajara (2.715 m).
Desde el aparcamiento (2.350 m), una pista ancha y relativamente suave nos aproxima a las oscuras coladas volcánicas, precedidas por los Huevos del Teide, esferas rocosas de varios metros de diámetro que se formaron al rodar ladera abajo la lava semisólida, como una bola de nieve.
Tras 1:30 horas (2.725 m) termina la pista y arrecia la pendiente, coincidiendo con el inicio de un sendero serpenteante con tramos empedrados que remonta el Lomo Tieso hasta el refugio de Altavista (3.270 m). A mitad de camino, hacia la cota 3.000, se encuentra un breve rellano con grandes bombas volcánicas, la llamada Estancia de los Ingleses, muy apropiada para hacer una parada técnica, tomar aire y darse la vuelta. Contemplamos como desde un balcón la espectacular muestra de vulcanismo que se extiende a nuestros pies, con toda la costa NE de la isla (desde La Orotava hasta Punta Anaga) al fondo.
Poco antes de llegar al refugio, el sendero se ve interrumpido por los primeros restos de nieve dejados por el fuerte temporal de noviembre.
Del refugio para arriba, la nieve casi continua y cada vez más dura convierte la senda en un terreno mixto donde buscamos los espolones e islotes salvadores de roca...
.. hasta que llega un momento, hacia la cota 3.500, en que las laderas de puro hielo nos invitan ya, sin posibilidad de réplica, a darnos la vuelta.
Estamos a un paso de La Rambleta, zona de miradores y de desembarco del teleférico, justo antes del puesto de control donde los guardas del Parque comprueban (en horario de 9 am a 18 pm) los permisos de acceso a la cumbre. Estos permisos suelen obtenerse online con una o dos semanas de anticipación hasta completar el cupo diario. Son imprescindibles (incluso aunque se haya subido a pie) para acceder en ese horario al sendero Telesforo Bravo, que remonta el cono cimero (o Pilón) hasta el cráter, siguiendo luego por su borde derecho hasta la cumbre.
En las condiciones actuales, con el sendero oculto bajo el hielo, los turistas del teleférico nunca osarían hacer uso de sus permisos, ni siquiera abandonar la plataforma de llegada, pero sí que pensaba hacerlo alguno de los montañeros con quienes charlamos en el refugio. A pesar del cierre oficial del sendero, si se lleva el material adecuado y el correspondiente permiso, está permitido al parecer rematar la ascensión, bajo la responsabilidad de cada cual.
Aunque hubiésemos sabido esto, seguramente no habríamos metido los crampones en la maleta, así que mientras descendemos al coche ya estamos pensando en la próxima: ¿indescriptible amanecer en la cima tras pernocta en el refugio...?¿o quizá la ruta 0.4 o integral desde la playa del Socorro hasta la cumbre, en dos jornadas?...
En el regreso, tendremos tiempo de tomar algo caliente en el Parador Nacional de la Ermita de las Nieves, que todavía a 2.100 m., nos recuerda al clima turolense por estas fechas. Pero poco después, nos encontramos ya de tiendas en Las Américas, el Benidorm tinerfeño, de noche, en pantalón corto y con sandalias. Qué tierra esta de Tenerife: en un rato se pasa del barraquito a la Dorada, del mojo al mojito, del crampón a la chola...
Fotos: luisfergo & nachete
Más información sobre el Parque Nacional del Teide.
Permiso de acceso al Pico del Teide. Central de Reservas Online
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